Existe un mito sobre el golf y los negocios que cuenta que en el campo de golf se cierran infinidad de grandes acuerdos comerciales y empresariales pero… ¿Qué hay de cierto en todo esto?
No es ningún secreto que las actividades deportivas y al aire libre fomentan las relaciones personales entre los aficionados a una disciplina común. En una sociedad donde a partir de niveles medios de economía, el bien más escaso es el tiempo, compartir una ronda con un directivo puede ser una gran oportunidad para acceder a él y a su empresa.
Existe un dicho que reza: “En una ronda de golf puedes llegar a conocer el carácter de una persona mucho mejor que en ningún otro sitio”. En 18 hoyos los jugadores nos enfrentamos a todo tipo de dificultades y retos. Es precisamente en esos momentos, donde el carácter de la persona emerge y podemos llegar a hacernos una idea muy aproximada de cómo se puede llegar a comportar esa persona en los negocios y en la vida en general. Enseguida apreciamos si se comporta como una persona respetuosa, amable, compasiva… o si por el contrario genera mal ambiente, reacciona bruscamente, maldice, se impacienta, presume de sus logros, etc…
Después de organizar cientos de torneos corporativos, puedo afirmar que el golf permite generar y fortalecer las relaciones entre sus practicantes siempre que se cumplan estos 10 mandamientos:
1º SÉ RESPETUOSO: El golf es un juego de superación personal por lo tanto, comencemos por el respeto a nosotros mismos, especialmente cuando no juguemos bien y continuemos por nuestros compañeros de juego y los valores en los que se asienta este maravilloso deporte. Ante todo respeto.
2º SÉ NATURAL: En el golf como en la vida, la impostura tiene las patas muy cortas y si queremos alcanzar relaciones duraderas, la mejor opción es mostrarnos como realmente somos, esta actitud genera confianza y camaradería. Si no nos llevamos bien en el campo de golf, mal empezamos…
3º SÉ PACIENTE: Uno de los valores más apreciados por los compañeros de partido es la paciencia y la tranquilidad que emana de ella. La paciencia indica seguridad y madurez.
4º SÉ HUMILDE: La humildad es el valor estrella del golf. Dada la enorme dificultad y precisión del juego, un solo mal golpe puede arruinar nuestra tarjeta. Del mismo modo, mostrarse moderado en los éxitos demuestra clase personal y respeto por los demás y por el deporte en sí.
5º SÉ AGRADABLE: Generar un buen clima en un partido de golf es un arte, especialmente si no es nuestro día… es algo muy apreciado por todos. Si destilas buen ambiente durante las 5 horas que dura la ronda las posibilidades de continuar con la relación profesional se multiplican. Todos tenemos un buen “amigo de golf” que nos alegra los partidos y nos hace reír y disfrutar hasta cuando jugamos mal. Intenta ser “ese” amigo.
6º SÉ FLEXIBLE: La flexibilidad es uno de los valores más apreciados en el mundo empresarial, denota saber adaptarse a las circunstancias, sean estas cuales sean. Por lo tanto, si no estamos compitiendo, no seas demasiado estricto a la hora de aplicar las reglas a los demás y ni demasiado laxo cuando te las aplicas a ti mismo, muestra interés y ayuda a tus compañeros de partido.
7º SÉ EMPÁTICO: Una de las virtudes más maravillosas que tiene el golf es que los propios jugadores comparten y comprenden los estados emocionales por los que pasan sus rivales y compañeros de partido al punto de animarles. ¿En qué otro deporte sucede eso? ¿Os imagináis a Sergio Ramos diciéndole a Torres: “Ánimo, a la siguiente me regateas”. La empatía demuestra interés y sensibilidad por los objetivos y retos de los demás. Mostrar interés por el partido de tus rivales es una cualidad que dice mucho a la hora de hacer negocios. Mira las bolas de tu partido y ayúdales a buscarlas cuando corresponda. ¿A que es muy agradable cuando un compañero de partido nos encuentra una bola que dábamos por perdida?
8º SÉ OPORTUNO: 5 horas de juego dan para mucho. Si en el hoyo 1 ya comenzamos a hablar de nuestros intereses empresariales y aspectos técnicos del mismo podemos llegar a lograr el efecto contrario, esto es, ser inoportunos, cansinos o pesados. Si esto sucede, es muy difícil que nuestro interlocutor quiera volver a vernos, de modo que es importante saber estar y buscar el momento preciso. En caso de duda esperaremos siempre al “Hoyo 19”.
9º SÉ INTERESANTE: Muéstrate interesante, pero no como partner de negocios sino como persona. Cuida las conversaciones, muéstrate seguro y confiado, transmite paz interior y sobre todo no seas un sieso, ni te encierres en ti. Muchos jugadores confunden estar concentrado con ser aburrido en el campo. ¿Repetirías partido con un jugador aburrido por muy bien que juegue? Seguro que no.
10ª INFÓRMATE: Si estás interesado en comenzar una relación comercial con alguno de tus compañeros de partido lo más sensato es buscar información sobre él y su empresa. Luego ya está el arte de cada uno para no parecer “un trepa”, sino alguien que está informado y se interesa sanamente por los demás. Recuerda que las personas importantes e influyentes tienen poco tiempo por lo que debemos ser concisos pero no agresivos o las ahuyentaremos a las primeras de cambio.
Así que ya sabes, el campo de golf puede ser el lugar perfecto para conocer personas influyentes e interesantes y tú puedes ser una de ellas si sabes cómo comportarte. La REGLA DE ORO es: “En el campo de golf se abren puertas, no se cierran negocios”.
*Esteban Berriochoa es Director de la Executive Golf Cup
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